Volví en otra ocasión, aunque nunca lo había hecho con mis niños.
Así que
aprovechando estas vacaciones navideñas, visitamos la Plaza Mayor, Sol, Preciados y tras tragarnos, con mucho gusto, premeditación y alevosía, el correspondiente atasco de la Gran Vía, llegamos a comer al Hard Rock. La verdad es que da gusto ver como disfrutan con todo lo que allí se expone. Se han hecho fotos con todo, pero lo que más les ha llamado la atención: - La moto de Bono, por supuesto, y El manuscrito de la canción "God" de John Lennon, where he doesn't believe..., de su puño y letra. - Los edificios de Nueva York colgando del techo en la sala privada y el impresionante cadillac blanco colgando del techo del bar. También las numerosas guitarras de Dover, Héroes del Silencio, Jarabe de Palo, Enrique Iglesias, Scorpions, Rolling Stones... y no sé cuantos más; El abrigo de Elvis... Bueno, también les ha llamado bastante la atención el traje superporno de la foto censurada de Madonna, en la que aparace en una posición bastante indecorosa, pero en fin... 
En cuanto a la comida... Nachos, muy buenos, fajitas, costillas ahumadas y hamburguesas a la parrilla. Y por supuesto un brownie como no lo hacen en ningún otro sitio; y todo ello amenizado con buena música. Por 80€ se come los cuatro.
Y claro, como el mundo es un pañuelo, no está de más que te puedas encontrar allí con alguien como Luis Palacios, de Cisco, por ejemplo.
En fin, lo dicho, que da gusto pasar un día con tus hijos viendo que todavía, a ver lo que nos dura, disfrutan con nosotros como lo que son, enanos, a pesar del 1,80 de Daniel y de la madurez de la que presume Mariam ;). Y es que, por muchos años que pasen, mis niños siempre serán eso, mis niños.