viernes, 30 de noviembre de 2007

Marta y María

"Yendo por el camino, entraron en un pueblo.
Y una mujer, llamada Marta, lo hospedó en su
casa.

Tenía ella una hermana, llamada María, que se
sentó a los pies del Señor y permaneció escuchan-
do sus enseñanzas.

Marta se agitaba de un lado a otro, ocupada en
muchos menesteres. Entonces se aproximó a Jesús
y le dijo:

-¡Señor! ¿No te importa que yo esté sirviendo
sola? ¡Ordena a mi hermana que venga a ayudar-
me!

Respondióle el Señor.

-¡Marta! ¡Marta! ¡Marta!

Andas inquieta y te preocupas por muchas cosas.
María, en cambio, eligió la mejor parte, y ésta
no le será arrebatada.
Lucas X, 38-42"


Desde pequeña guardo en papeles, libretas, cuadernos y demás, citas y textos que leo y me gustan, me dicen algo especial ó, simplemente me llaman la atención.

Papeles y notas que, por supuesto nunca sé donde dejo y que he perdido en mudanzas, ordenando cajones y todos esos menesteres.

A lo mejor aquí no los pierdo :)

Estos versículos del Evangelio de San Lucas siempre me han encantado. Y mucho más me encantó encontrármelos en ese libro tan especial, e imposible de dedicar, de Paulo Coelho, "El Alquimista".

No hay comentarios: